Ha tenido que pasar más de un año para que pueda escribir sobre mi experiencia en Panamá. El Panama Mural Fest y la estancia en Panamá ha sido, sin duda, una de las experiencias más intensas y marcianas que he vivido en los años que llevo pintando.
Hay proyectos a los que hay que echarles muchas ganas para sacarlos adelante. Muchas ganas y tener mucha resiliencia, así que antes de empezar, quiero dar las gracias a Disem y Dreps por el trabajo y la atención. Pero, no voy a hablar del festival en sí, sino del viaje al completo. Voy a contar como lo vivimos lo integrantes de Fours que fuimos para allá y que convivimos una semana bajo la humedad y el calor abrasador.
La verdad que el aliciente de encontrarnos con nuestros amigos, en un país que no habíamos visitado antes, fue decisiva para aceptar la invitación al festival. Personalmente me encanta ir a sitios que no he ido antes.
Ciudad de Panama es chocante como poco. Los contrastes son abrumadores, y te asaltan de maneras que no imaginas, pero de la gente con la que tratamos allí no tengo más que buenas palabras. En esta frase no incluyo al personal que trabaja en el Youth Hostel donde nos alojamos. De los que no hablaré aquí tampoco.
A Panama, llegamos escalonadamente, Eskae, Hoacs, Soten, Harrybones y yo. Cada uno de nosotros tenía que pintar un gran muro para el festival (bueno, Harry y yo íbamos a compartir uno) pero mientras esto se ponía en marcha, decidimos pintar otras piezas. Obvio, ¿no?
El primer día lo dedicamos a comprar pintura (como duelen esos precios) y a contactar con escritores locales. Eskae y yo teníamos muchas ganas de pintar ese mismo día, pero no pudimos hacer más porque empezó a llover como si no hubiese un mañana. Es lo que tiene visitar el país en temporada de lluvias.
Al día siguiente, quedamos con Jour y Sokor. El muro que íbamos a pintar pertenecía a una fábrica, nos habían dado permiso y (¡atención!) nos escoltaba la policía. En mis historias de IG, iré colgando videos de esos días, para que entendáis mejor lo que os cuento, y para dar contexto a las fotos.
A mí, y creo que se nota, me gustan las superficies difíciles. Ésta lo era y la situación también. Al área no se querían acercan ni uber, ni taxis.. y no hay muchas otras maneras de llegar. Aunque tuvimos suerte y nos plantamos allí y conseguimos reunirnos con el resto de la organización. Pintamos y aquí podéis ver como quedaron las piezas…
No lo va a leer, pero me acuerdo de la señora que vigilaba la fábrica durante todo el fin de semana y que no tenía acceso a un lavabo. Cubo vs Musa.
(English below)
There are projects that you have to really want to get ahead. A lot of desire and have a lot of resilience, so before I start, I want to thank Disem and Dreps for the work and attention. But I'm not going to talk about the festival itself, but about the entire trip. I am going to tell how the members of Fours who went there and who lived together for a week under the humidity and scorching heat.
The truth is that the incentive of meeting our friends, in a country that we had not visited before, was deciding factor in accepting the invitation to the festival. I personally love going places that I have not been before.
Panama City is shocking to say the least. The contrasts are overwhelming, and they assail you in ways you can't imagine, but I have nothing but good words about the people we met with there. My previous sentence does not include the staff who worked at the Youth Hostel where we stayed. Which I won't talk about here either.
In Panama, we arrived in seperately, Eskae, Hoacs, Soten, Harrybones and me. Each of us had to paint a large wall for the Panama Mural Fest (well, Harry and I were going to share one) but while this was getting underway, we decided to paint other pieces. Obviously!
We spent the first day trying to find shops that sold spraypaint (those prices hurt) and contacting local writers. Eskae and I really wanted to paint that day, but we couldn't paint because it started to rain as if there was no tomorrow. This is what happens when visiting the country during their rainy season. The next day, we meet Jour and Sokor. The wall that we were going to paint belonged to a factory, they had given us permission and (attention!) The police escorted us. In my IG stories, I will be posting videos of those days, so that you better understand what I am telling you, and to give context to the photos.
I, and I think it shows, I like difficult surfaces. This was a difficult surface and so was the situation. The was an area where uber's nor taxi's wanted to go in to and there are not many other ways to get there. Although we were lucky and we planted ourselves there and managed to meet with the rest of the organization. We were able to paint and here you can see how the pieces were ...
She won't read it, but I remember the lady who was responsible for watching the factory all weekend and who didn't have access to a toilet. Bucket vs Musa.